samedi 29 août 2009

Un Grifo.

El grifo de la ducha late a 77 latidos por minuto.
O puede que esté llorando.

Los fontaneros dicen que es necesaria una reparación.
Cuando de lo que se trata es de Latir.




jeudi 27 août 2009

Maruja Torres.

"He pasado años cribándome el cerebro a mechones -es el cerebro lo que duele, no el corazón; el cerebro es el único órgano capaz de segregar melancolía-, y después de no poco descalabro había alcanzado, allá en la tierra, la sensata conclusión de que es inútil darle tanto al tarro."


mardi 25 août 2009

Jugaba.

Jugaba a ser Amélie.
Y se quedó remoloneando en tonos sepia.
Demasiado simétrico concluyó.
Prefirió la M de Montaña Rusa,
la M de Mejor así.


Caramelitos.

- Mira tengo en la consulta una niña de 17 años epiléptica que lleva unos 7 años en tratamiento farmacológico, con valproato, está muy ansiosa, triste, deprimida, sólo hace que llorar.
- Mujer, si está ansiosa dale un caramelito de esos que calma, que no le pasará nada.
- Bueno, digo yo que primero tendremos que proporcionarle unos oídos.
- No no de eso nada, tengo la agenda muy ocupada. Cero tiempo para escuchar.
- ...

Estupefacta.




lundi 24 août 2009

Otoño


Otoño es para sentarse y ver cómo los árboles se desnudan minuciosamente, así, mientras el verdillo se apodera de cada rincón antes deshabitado. En Otoño vemos las formas imposibles de las ramas y las nubes se reúnen en "petit comité" decidiendo a quién le toca las siguientes gotas. El monte deja de oler a seco y recobra la humedad. Me encanta ese olor, aunque las tormentas de verano y el olor a tierra mojada tampoco están nada mal. Aunque de eso no me acuerdo, será que no llovió. Yo le pido a Otoño que llegue que corra que vuele, que el verano está resultando demasiado largo y ya empiezo a tener ganas de chapotear por encima de los charcos con las botas de agua y de hacer crujir las hojas.

Todo a su debido tiempo.

vendredi 21 août 2009

Allí donde la tierra es roja uno se queda entre la aridez del desierto y la vida de las dunas empujadas por los susurros noctámbulos. Volver es como dejar la Libertad a un lado y regresar a los días iguales. Aunque he aprendido que no es ni mejor ni peor, es diferente. Lo que sí que difiere son los cielos. Allí donde las bombillas están en peligro de extinción... las estrellas son las protagonistas de un cielo que hace chirivitas y eso buff es espectacular. Imagino que también guardas cadauna de esas miradas y arrugas que recorriste de arriba abajo con y sin párpados. Las puertas azules se abrieron y ahora no sabes cómo cerrarlas.


mardi 11 août 2009

Distante

Aquello era como el Far West.
Un salvese quien pueda.
Nada donde esconderse.
Y aún así logró encontrar Agua.




Dislocar.

Me dislocas las entrañas
revolviéndome la piel.

Nadie puede reducir
esta luxación.


De golpe, que lo hagan de golpe.


Enfermedad.


La enfermedad nos arrolla en el intento de dejarnos en un segundo plano, exterminarnos, volvernos insignificantes.

La enfermedad nos extirpa los órganos capaces de latir, aterrados ante el dolor de nuestras formas.
La enfermedad oscurece cadauno de nuestros rasguños, imposibilitando la movilización hacia una sonrisa mejor.
La enfermedad transporta nuestra vulnerabilidad y la pone encima de la mesa, jugando con ella al azar.
La enfermedad nos destroza la córnea dejando cicatrices incapaces de subsanar malmetiendo la vista.
La enfermedad nos intoxica con cadauno de sus tratamientos que huelen a ácido clorhídrico
La enfermedad coloniza todas las grietas que no pudimos sellar cuando estábamos en calma.
La enfermedad nos marchita la piel incrementando las patas de gallo y las ojeras apoteósicas.
La enfermedad nos estorba en el día a día, en el paso a paso, en el pito pito colorito.
La enfermedad nos persigue y nos derrota, nos amordaza, cautivos.
La enfermedad nos paraliza cual toxina botulínica.
La enfermedad no entiende de momentos.
La enfermedad esculpe los lagrimales hidratándolos.
La enfermedad desea unas manos unidas por el dolor.
La enfermedad se muere de hambre, nos devora, tiene una boca inmensa y unos dientes de tiburón.
La enfermedad es carnívora y codiciosa, lo quiere todo, avariciosa.
La enfermedad está en todas partes, nos persigue, nos arrambla, nos alcanza.

A no ser que tú...

desees vencerla...

enfermedad
no se merece empezar
en
letra mayúscula.
tampoco mis respetos


Volar.



Porque volar es igual que vivir,
ambas requieren de un aprendizaje.
Película titánica donde las haya.
De nuevo Niñoinquieto y Abuelotristón.
Y sí, lloré al verla.
¿Cómo no?
E-mo-cio-nan-te.

Me quedan 8677 Vidas.
Pienso agarrame fuerte.
Esta vez la curva no gana.
Te lo aseguro.