mardi 9 décembre 2008

El amor en mi casa llega los Domingos.

El amor en mi casa llega los domingos.
Se viste con el batín, las pantuflas, el pelo desordenado y camina despacio, con sigilo para no despertar a la Reina. Baja con una sonrisa en los labios a la cocina y allí empieza todo. Aún y con legañas, se puede dibujar un corazón en mi casa.

¡Fogones toca ponerse a currar!

Mientras prepara la cafetera se saca su As de la manga... ¡Marchando unas tostadas para la Sra. dormilona-sábanas pegadas-que tanto le gusta (ella a él/él a ella)! El pan salta, café pita, todo va viento en popa.

Rey sale al jardín en busca de una flor (diferente en función de la época del año, claro está). Como estamos en días de romero-lluvia-humedad corta una ramita y la deposita sobre la bandeja con patas
(la misma protagonista de mis días de tos, mocos, fiebre, dientes mellados y algunos centímetros de menos, la misma de los días de encontrarse (no tan) mal y ese alguien llamado Papá te llevaba la comida a la cama porque seguro que así te recuperabas antes).

Todo preparado y dispuesto, sube el amor sin detenerse, sin vacilar. Yo miro sin que se dé cuenta por la rendija de una puerta entreabierta. Soy una cotilla, no puedo evitarlo. Y... ¡TACHÁN! Reina sale de su letargo.

Mientras, a mí me complace descubrir que el amor en casa llega los Domingos y que es así de sencillo. Lo malo es preguntarse si eso nos basta-bastaría.

3 commentaires:

duendecillo * a dit…

Que el amor siga llegando mientras tu miras por una rendija, debería bastarnos. Así comprenderíamos, que el amor está en los pequeños detalles de domingo a domingo, y de romero a lavanda. :)

Anonyme a dit…

el amor en tu casa los domingos se llama d?

flauteta a dit…

El amor en mi casa los domingos se llama abecedeefege.
Y si, en mi casa y en todas las casas (en la tuya también) los domingos se llaman "d" por ser la primera letra del último día de la semana.
Tú tienes un nombre muy original... "anònim".