samedi 2 mai 2009

Rufino

Rufino ha estado en-AMOR-ado toda la vida de Rufina. De ella le gustaba su pelo rubio, sus brazos fuertes, sus pinturas, sus bordados, sus canciones y los paseos en domingo.
Rufina sabía que era muy afortunada aunque no le diera muchos abrazos a Rufino, se los enviaba cada atardecer en un paquete imaginario y a él le llegaban porque al llegar a casa tenía esa estúpida sonrisa dibujada en la cara.
Rufino tenía las manos curtidas pero eso a Rufina le traía sin cuidado ya que cuando hablaban en caricias las rugosidades ni existían. Él era alfarero y así le trabajaba el cuerpo a ella. Sabía de manos y de acariciar. Rufino entendía como era ella y no necesitaba nada más. Un gran amante, dice Rufina.
Nacieron 5 hijos que contrariaremente al dicho jamás cupieron en los cinco dedos de una mano. Todos y cadauno de ellos fueron muy deseados, esperados. Rufina no se volvía a quedar embarazada hasta que el pequeño no había cumplido los 4 años, así se cercioraba que le prestaba la atención adecuada a esa infancia de los primeros años tan importante.
Llegaron las arrugas y las canas, se fueron los hijos de casa. Quedaron solos. Rufino no paraba de decir a Rufina "Mira qué bien que estamos solos, ahora me podré dedicar a ti". El dia de su jubilación pasó lo que no tenía que pasar... un accidente cerebrovascular, más comunmente llamado ictus y entonces el cerebro se fue a la mierda y los recuerdos insertados en cadauna de las grietas de la casa, abiertas para siempre.
Rufina se borró para Rufino. Y aún y así se volvió a enamorar de ella. No dejaba de decir qué brazos más bonitos tienes, qué pelo. ¿Y si nos casaramos tú y yo? Cuando uno está hecho para el otro pasa que se vuelven a enamorar aún y con los recuerdos quemados. Ella le pregunta por Rufina y él le contesta que ella ya hace años que murió. Es curioso porque eso es justo lo que piensa ella... vivo muerto.

Mientras, Rufino va pasando la jubilación perdiéndose la memoria, y Rufina va pasando el tiempo perdiéndose a su marido, llorando.



2 commentaires:

duendecillo * a dit…

neni...pero q historia más bonita!!!! mis pelos se iban erizando a medida que leia, y mis ojos se mojaban conforme el texto avanzaba..ay....eso es estar hechos el uno para el otro... ya ves, hoy estoy sensible...

:) te quiero!

flauteta a dit…

jo també neneta!
Què passa? Estàs bé?
MUAKA! A veure si quedem que ja fa dies que no.